Mi primer contacto con la acupuntura fue como paciente, hace 15 años, para no caer en depresión después de la ruptura de mi matrimonio.

La acupuntura me ayudó, no sólo a salir adelante con la separación, sino que además, los cambios internos producidos a lo largo de estos años, me llevaron a dar un giro radical a mi vida.

Comencé a ver la vida de otra manera, a no dar importancia a los sucesos que no la tienen, a atreverme a hacer cosas diferentes de las que había hecho hasta entonces, de poner “ patas arriba” un sistema de creencias impuesto y no cuestionado hasta entonces.

A raíz de este cambio estudié masaje Ayurveda en el Centro Shiva-Shakti de Yoga Integral y un tiempo después comencé a estudiar Medicina Tradicional Oriental en la Escuela Neijing, en Tian, curso de Posgrado Psicoterapéutico en Medicina Tradicional Oriental por el centro Shen Que, Curso de capacitación Humanista por la Asociación Hispanoamericana de Acupuntores Beiijing´84, Masaje Energético Tuina en la Escuela Neijing, en Tian.

Son dos sistemas que tienen la misma base pero que han evolucionado de forma diferente, Ayurveda en India y Medicina Oriental en la parte de China.

Es un técnica muy eficaz para solucionar cualquier malestar y esto lo he experimentado y lo experimento en mi misma y cada día en los pacientes.